A ver, a ver...¿Qué puedo investigar?

      Cuando eres docente, y más de niños de edades tan tempranas, es importante poder obtener información de otras fuentes, y no solo de lo que te digan tus pequeños alumno.

     Esta premisa siempre debe estar pululando por tu mente. Todo es objeto de investigación, de cualquier tema puedes lanzar una hipótesis y elaborar un estudio para evidenciar su validez. Todo vale, desde si los niños que duermen 8 horas rinden  más, hasta si los niños nacidos bajo el influjo de la luna llena son más altos.

    Los objetos de investigación son infinitos, pero no tenemos que olvidar lo que somos y la finalidad que vamos a darle a esta investigación educativa.

    Como maestras, esta investigación nos debe servir para enriquecernos. Es decir, con el resultado obtenido vamos a mejorar nuestra metodología, la atención de nuestros pupilos, su rendimiento en el aula, su socialización...en resumen, nuestro objeto de investigación debe estar controlado por nosotras de tal manera, que si demostramos nuestra hipótesis, y hay que modificar algo, lo podamos hacer.

    Sería absurdo pretender que unos padres cambien de vivienda porque yo he demostrado con mi estudio que los niños que viven en pisos altos son más listos que los que viven en pisos bajos. ¿Para qué? ¿Qué consigo?

    Estas investigaciones, denotan por parte de la maestra, un interés añadido por sus alumnos. No debería ser así, pero como en el caso de la innovación educativa, aquí también estamos ante un sobreesfuerzo de la maestra. Tomar notas, observar, llevar listas de control...todo esto, supone un incremento en tu trabajo diario.

    No obstante, si la investigación esta reflexionada, estudiada, meditada...los resultados de la misma pueden ser muy reveladores y muy útiles.

    Yo creo, que siempre debes pensar en ayudar a tus niños, y si llevando una lista de control o trabajando un poquito más consigues que ese niño que apenas habla, y que es rechazado por sus compañeros llegue a integrase, has trabajado bien, ha merecido la pena todo.

    Trabajamos con personas, con niños, niños que son esponjitas y para los que tu eres una especie de dios. Aprovechémoslo. Formemos personitas que hagan que este mundo vaya un poquito mejor.

Pensando en la innovación

    Durante este cuatrimestre, hemos recibido información expresa y tácita sobre la innovación educativa. En mi opinión ha quedado demostradamente aclarado, la importancia de esta, en el nivel educativo, no solo para no anquilosarse en las enseñanzas, sino, y mucho más importante, para optimizar al máximo las posibilidades de aprendizaje de los niños.

      Si, por supuesto, todo el mundo lo sabe, los tiempos cambian, las necesidades también, pero...¿Qué me supone a mi llevar a cabo un proyecto innovador?

      Las posibilidades son tan numerosas como personas tengas a tu alrededor. Para empezar un sobreesfuerzo por tu parte, que obviamente no esta pagado con dinero, sino mas bien se trata de una remuneración  a nivel personal, a la hora de meterte en la cama y pensar "soy maestra". 

         ¿Críticas? solo tienes que pensar que si tu trabajas de más, estas acrecentando la diferencia con los que trabajan de menos. NO todo el mundo ama la profesión de la misma manera, y si tu te implicas, te involucras, dedicas tu tiempo libre a preparar tu proyecto, dejas en evidencia a aquel compañero que antes de terminar de sonar la campana ya va camino del coche con su cara gris y con una frase en la mente "no me pagan para eso".

     Las seis ponentes que han venido a contarnos su experiencia coinciden el lo fundamental. A parte de ser todas mujeres, todas han pasado por un proceso duro. Se les ha cuestionado y han tenido que demostrar continuamente su valía. Pero TODAS, han sido muy valientes, no se han achicado, han seguido adelante defendiendo un proyecto en el que creían y demostrando que en la enseñanza, desempeñando el empleo que sea, ya sea tutora, directora o inspectora, hay personas que dejan huella, y que son MAESTRAS con todo su significado y con toda la responsabilidad que conlleva serlo.

Webquest: Soniagafotas

Trabajando con la PDI

     Nos estamos formando como maestras, y claro esta, tenemos que adaptarnos y aprovechar todas las innovaciones tecnológicas que estén a nuestro alcance.

     La tiza y el borrador parecen ya un sueño de la vieja escuela, cuando en nuestra aula nos encontramos con una pantalla que ocupa una pared y que podemos usar a nuestro antojo, pero...¿Hemos cambiado el encerado por una pantalla táctil?o realmente, sabemos utilizar esta nueva herramienta educativa?

    Para empezar a familiarizarnos con este nuevo recurso tecnológico hemos realizado un proyecto educativo en el cual hemos incluido diversas actividades de PDi de elaboración propia. Aquí van las mías.

Actividad 1: ¿Dónde están mis ojos?

    Con esta actividad, los niños tendrán que identificar los ojos con los personajes a los que pertenecen.

    Para ello, primero examinarán las imágenes completas y posteriormente, sirviéndose de un rotulador táctil o de su propio dedo, las unirán.

Actividad 2: Día y noche

   

 

       Con esta actividad pretendemos trabajar los conceptos de día y noche, la luz y la oscuridad, lo que nuestros alumnos hacen por cuando esta el sol y cuando ya ha salido la luna.
    Queremos que además de trabajar los objetivos propios de la actividad, asimilen que hay actividades que se realizan de día, como ir al cole o al parque, por ejemplo, y otras que se hacen de noche, como dormir.
        La actividad se complementara con fichas, preguntas y canciones.

Actividad 3: ¡Dame una A!

    La realización de actividades con PDI es muy atractiva y anema para los niños, así que vamos a aprovechar para que consoliden los conocimientos de lectoescritura adquiridos y para que los amplien.
    Combinamos vocales en este caso, en mayúsculas, ya trabajadas en el curso anterior, e introduciremos sus homólogas minúsculas.
    Para ello, nos servimos de dos conceptos ya trabajados como son ojo y gafas.

Actividad 4:¿Me ves?

 

   Vamos a presentar a nuestros alumnos una serie de viñetas con distintas imagenes, unas que sirven para ver y otras, que no.
    Trabajaremos en clase previamente los conceptos y una vez asimilados, pasaremos a realizar la actividad de PDI.
    Los niños arrastrarán las imagenes al recuadro que proceda, y una vez finalizada la actividad, la testearemos.
    La maestra estará en todo momento supervisando la realización de la misma, con el fin de hacer partícipe, no sólo al niño que interactua con la pizarra, sino también al resto de compañeros.

Actividad 5: ¿Para qué sirven mis gafas?

    Vamos a ejercitar la memoria, relacionar conceptos, conocer distintos tipos de gafas y el uso que se les da a cada una de ellas.
   La actividad es muy versatil, pudiendo realizarla un niño, por parejas o participando la clase completa. De igual manera se puede incrementar su dificultad, añadiendo fichas o minimizarla si fuera necesario, por ejemplo, para ser realizada por nuestro alumno con necesidades educativas especiales.
    Se buscarán las parejas, y a medida que estas van apareciendo, desaparecen de la pantalla.